miércoles, 15 de julio de 2009

Palabra para la Iglesia las Acacias

Suher, la hermana egipcia que vino acompañando a la familia Benner en esta oportunidad visitó nuevamente al grupo de misiones y quizo esta vez entre otras cosas dejarnos una palabra que el Señor compartió con ella para nosotros estando ella aún en Holanda orando para su viaje a Venezuela. El pasaje que quizo compartir lo encontramos en:

Hechos 4:30 (Nueva Versión Internacional)
Por eso, extiende tu mano para sanar y hacer señales y prodigios mediante el nombre de tu santo siervo Jesús.»

Nos comentaba Suher, que la primera vez que entró a la iglesia quedo soprrendida como habia una cantidad enorme de personas esperando a fuera para que el culto anterior terminara para entrar a un proximo culto, eso la impacto. Tambien pudo sentir el avivamiento en nuestra iglesia y esa sed y hambre de escuchar la palabra de Dios, y por alguna razon sintió que habiamos muchos jovenes con problemas en las rodillas o piernas, y recordó el pasaje que el Señor le mostró en oración antes de venir a Venezuela y dijo es en esta iglesia donde el Señor quiere que yo deje esta palabra. Nos animo a extender las manos sobre nuestros jovenes y a declarar sanidad física y espiritual para cada uno de ellos, nos motivo a declarar que la economía venezolana a pesar de que muchos dicen que esta decayendo, a que declararamos que no es así que vamos a tener un repunte económico jamás visto, jamas vivido.

Luego de este compartir el hermano Sergio Hernández, se acerco al grupo y dijo, hermanos, yo creo firmemente que esta palabra de la que nuestra hermana esta compartiendo con nosotros, no se trata de cojeras o mal de rodillas a nivel físico, sino a nivel espiritual, si nos comparamos con tantos jovenes que vemos en las calles, en los cines, en las escuelas, en los colegios, en las universidades, en los sitios públicos, vemos a tantos jovenes cojeando porque no conocen de Jesús, vemos como se pierden en las drogas, en la prostitución, en la homosexualida. Así que doy Gloria a Dios por esta hermana que Dios ha enviado a compartir esta palabra. Y los animo a Uds. a que meditemos en esta palabra y actuemos.

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